Taller de Lógica. Comunidad de Indagación, 26 de septiembre de 2013
Nuevamente la primera actividad de la comunidad de indagación consistió en comentar la experiencia, los conocimientos adquiridos y las dudas que quedaron respecto a la sesión anterior, en este caso la sesión del 25 de septiembre de 2013.
Los participantes mostraron no sólo un mayor interés en el curso y en su aprendizaje en lógica y argumentación, sino adicionalmente mostraron mayor destreza en el uso de conceptos como: razones, oraciones, proposiciones, argumentos, verdad, validez, argumentos inductivos, argumentos deductivos.
Respecto al nivel metodológico comentaron que la comunidad de indagación se ha convertido en un contexto de aprendizaje donde se ha incrementado la confianza para opinar sobre los diferentes temas, lecturas y ejercicios que se han venido trabajando. En esta línea, reconocieron la importancia de seguir reglas de comportamiento, como levantar la mano, respetar las opiniones de todos los participantes, no interrumpir a sus compañeros, con la finalidad de crear un ambiente de trabajo racional y de integración de la comunidad.
La facilitadora Arelí hizo diferentes comentarios sobre la dinámica que debe seguir una comunidad de indagación, distinguiendo diferentes niveles de discusión ex. gr. el abordaje de un tema puede hacerse en principio desde el diseño de preguntas y, a partir de ellas, leer grupal o individualmente una actividad de aprendizaje para contestar a tales preguntas o bien, iniciar con una lectura de aprendizaje y a partir de la comprensión de su contenido elaborar preguntas relevantes, analizar sus posibles respuestas y obtener productos de aprendizaje mediante la discusión razonada de tales observaciones.
Posteriormente los facilitadores Arelí y Jesús señalaron una pregunta que se encontraría a la base de toda la sesión: ¿cómo la lógica y la argumentación se aplica a la vida diaria, a la vida disciplinar y al trabajo docente?
Los participantes de inmediato se interesaron en los contenidos particulares de la indagación, sobre todo al reconocer que uno de los problemas para aprender lógica es considerarla tan sólo como un campo sintáctico árido y un campo semántico técnico y, no como una ciencia que puede ayudarnos a vivir mejor con su aplicación i.e. aprender a razonar correctamente y a discutir racionalmente es importante para vivir mejor.
La facilitadora Arelí comentó algunos puntos del programa (tabla de aprendizaje): i. A1 Distinguir argumentaciones de otros tipos de interacciones lingüísticas; ii. A2 Identificar premisas y conclusiones de un argumento; iii. A3 Reconocer las presunciones e intenciones en la integración argumentativa.
A continuación el facilitador Jesús les hizo ver a los participantes que para satisfacer adecuadamente los puntos del programa comentados por Arelí y, sobre todo, para que pudiesen adquirir los conocimientos implicados en tales contenidos, era muy importante esforzarnos por considerar la parte aplicativa de la lógica. Comentó que de hecho, tal programa no estaba diseñado para aprender sólo lógica formal sino para entrar al análisis de la estructura de los razonamientos sobre cuestiones de la vida diaria considerando sus matices analíticos y evaluativos –en términos de Alejandro Herrera: “…entender y evaluar los argumentos en sus hábitats naturales”, Herrera, “¿Qué es el pensamiento crítico?”.
Se hicieron diferentes distinciones analíticas a partir de la afirmación ‘Hay mujeres bonitas e inteligentes’. Se distinguió la noción de implicatura gramatical o conversacional de la noción de implicación lógica. A partir de un Handout: “Marcadores o Indicadores de premisas y conclusiones” elaborado por Jesús se analizaron grupalmente las expresiones del español que nos permiten identificar el diferente papel que pueden jugar proposiciones en una estructura argumentativa i.e. proposiciones que apoyan a otras proposiciones (premisas) y proposiciones que necesitan de razones, de apoyo para ser afirmadas (conclusiones). Al respecto, Jesús también comentó que es importante considerar: si bien estas listas son altamente útiles para la identificación de premisas y conclusiones al no ser exhaustivas, es fundamental que los estudiantes aprendan a reconocer por el contenido proposicional mismo cuándo tal contenido ofrece razones en un argumento (premisas) o bien tal contenido se infiere de otras proposiciones i.e. se trata de una proposición que recibe apoyo de otros ejemplares proposicionales (conclusiones). Incluso, el estudiante debe ser capaz de reconocer cuando se encuentra solo frente a un conjunto de proposiciones y cuándo se encuentra genuinamente frente a un argumento considerando –en los lenguajes naturales- el sentido, significado, contenido de una proposición en relación con las otras proposiciones del conjunto. De otra manera, el estudiante deberá ser capaz de identificar el conjunto de proposiciones y construir a partir de ellos un argumento.
Posteriormente, Jesús comentó que consideraciones del tipo anterior nos llevan no sólo a identificar sino a distinguir la propiedad lógica de la validez de un argumento, de la propiedad extra-lógica de la relevancia o solidez de un argumento, cuando pretendemos que nuestros razonamientos sean concluyentes.
Con la finalidad de sensibilizar a los estudiantes en la utilidad de la lógica para la vida diaria se leyeron las primeras seis cuartillas en grupo y en voz alta, del artículo de Morado (2005). Particularmente se leyeron las secciones: “La lógica como nutrición mental”, “Tres niveles de la lógica”, “Actos de habla” y “Argumentación”. Los participantes se dieron cuenta que la lógica “nutre nuestra mente como las vitaminas y el ejercicio nutren nuestro cuerpo” (Morado, 2005).
Para obtener los productos de aprendizaje de todo lo visto hasta ese momento se realizó una comunidad de indagación, partiendo de la determinación de reglas del debate. Los participantes expusieron su punto de vista y se convencieron de la importancia de la lógica y la argumentación para la resolución de problemas prácticos, aquellos que van desde los más básicos de su cotidianidad, hasta la resolución de problemas disciplinares o conceptuales y de su práctica docente.
La actividad siguiente fue la resolución del ejercicio II de la lectura “Aprendizaje 2”. Con ello se intentó que los participantes aplicaran los conocimientos obtenidos para la identificación de premisas y conclusiones, así como para la identificación, evaluación y construcción de argumentos. Posteriormente se realizó la lectura de “Aprendizaje 3: Reconocer las presunciones e intenciones en la interacción argumentativa” y se abordó la resolución del Plan de trabajo 1 correspondiente a tal lectura.
Una vez comentados los resultados de la actividad, los participantes pudieron madurar su respuesta a ¿Para qué argumentar?:…cuando discutimos para influir en los otros para que acepten nuestras ideas construimos un discurso argumentativo. Argumentar es defender una idea aportando razones que la justifiquen con la intención de influir en otros (Jasso, Handout: “Conceptos Básicos”).
Por último, Arelí presentó la página de Red de profesores de lógica Chihuahua: www.edmodo.com, con la finalidad de que los participantes se dieran de alta en tal portal. Por su parte, Jesús les dio a conocer la página http://plato.stanford.edu/, particularmente la entrada “Informal Logic”: http://plato.stanford.edu/entries/logic-informal/, haciéndo énfasis en la excelente bibliografía que ahí aparece sobre los temas de lógica informal, Pensamiento Crítico y Argumentación.
Con esto se terminó otra interesante: comunidad de indagación.