Martes 1º de octubre de 2013. Primera jornada de taller en el CETIS 16 de Querétaro. Esta vez mi compañero instructor es también filósofo y uno muy bueno: Carlos Romero de la FFyL de la UNAM. Se especializa en temas de lógica, lo cual idóneo para este taller. Llegamos temprano al plantel (8:40 am) pero los profesores estaban impacientes pues les habían dicho que el taller iniciaba a las 8 am y no a las 9 am, como a nosotros nos habían puesto en el cronograma. Como ya llevaban tiempo esperándonos y como el material para todos apenas estaba siendo fotocopiado, el Director del plantel los mandó a todos a desayunar a la cafetería y los cito de vuelta para las 9:30 am. A esa hora se inauguró oficialmente el taller. Comenzamos luego con una breve introducción, con los objetivos del taller, nos pusimos de acuerdo con los horarios, etc. En seguida pedimos a los asistentes que se presentaran y dijeran su formación y de dónde venían. Procedimos a formar equipos y dimos comienzo al Aprendizaje 1 todo de manera ordenada y sin mayores contratiempos.
Pude notar que la preparación de los profesores asistentes al taller era mayor que la de los profesores de Toluca. Había ahí gente con maestría e incluso algunos con doctorado. No obstante, profesores con licenciatura en filosofía sólo había dos de un total de cuarenta aproximadamente. Las participaciones eran relevantes e inteligentes y pronto la comunidad llegó sola a pisar el terreno de los contenidos conceptuales. En general los profesores son muy receptivos y participativos. En la primera actividad del Aprendizaje 1, después de haber leído todos por turnos y en voz alta, dejamos que cada equipo elaborara sus propias preguntas para discutir.
Al principio sí estaban un poco perdidos, pues hicieron preguntas en torno a la educación o sobre la importancia de ir a la escuela. Posteriormente, guiados un poco por nosotros, escogieron las tres preguntas que tenían más que ver con el tema de las razones y la argumentación. El día transcurrió sin mayores contratiempos. Carlos Romero hizo precisiones sobre algunos conceptos clave y continuamos después con los Ejercicios I y II. La mayor parte de los profesores entendió pronto de qué iba, aunque varios de ellos tardaron tiempo en comprender que en el ejercicio uno se trataba sólo de decir en qué casos la palabra “razón” (o “razones”) estaba siendo utilizada en su acepción de “argumento” o “argumentar”. Muchos decían “La número x SÍ ES UN ARGUMENTO”, cuando no se trataba de identificar argumentos pues en realidad ninguno lo era en este primer ejercicio. En el Ejercicio II ya estaban todos más claros y centrados. Se equivocaban poco y si se desviaban, lo hacían por sendas por lo menos interesantes o relevantes para el tema en cuestión. Carlos Romero precisó lo que eran los enunciados constatativos y los realizativos. Yo le ayudé un poco distinguiendo a aquellos de lo que es propiamente un argumento y lo que lo forma. Se hablo pues de premisas, de marcadores y de conclusión. Jugamos un poco con los ejercicios, preguntando a los profesores cómo podrían hacer un argumento con algo que no lo era, y se llegó a mencionar la posibilidad de que premisas, marcador o conclusión pudieran estar suprimidas u omitidas.
Fue una buena jornada y hay un ambiente general de respeto y de participación. Mañana planeamos comenzar con una rápida recuperación de lo visto hoy en el taller y continuar con el material del Aprendizaje para respetar en la medida de lo posible los tiempos que marca el cronograma.